1Corte la berenjena y el calabacín en láminas.
Extiéndalas en una placa y agrégueles sal por encima con el fin de eliminar el sabor amargo que por naturaleza tienen. Deje reposar por unos 30 minutos y enjuague muy bien con agua. Seguidamente, en una sartén o una parrilla, dore las láminas y reserve.
Cocine los espárragos -previamente limpios con un pelapapa- en agua hirviendo, de 3 a 5 minutos.
Es muy importante que los pase después por agua helada para que queden crocantes y verdes.
2Corte la pechuga de pavo en tajadas.
3Para armar la ensalada, mezcle las hojas de rúgula con la mezcla de lechugas asiáticas, agregue las láminas de berenjenas y calabacín, los espárragos y el queso feta cortado en cubitos.
Condimente con sal y pimienta al gusto.
Agregue un chorrito de aceite de oliva y termine con cranberries y nueces de nogal.